domingo, 29 de junio de 2014

jueves, 27 de enero de 2011

Del horno Barranquilla al congelador Hartford




Si piensa que los arroyos de Barranquilla son lo peor, que el ‘frío’ que hace en las noches por las brisas carnavaleras es insoportable, o que un aguacero en ‘La Arenosa’ está entre las calamidades de un país tercermundista, está equivocado. Y si es de los que se queja permanentemente del calorcito de nuestra tierra, no sabe lo que es pasar una tormenta de nieve o nevada, y dormir con varias cobijas que no alcanzan a amainar los 25 grados bajo cero que suelen hacer por esta época en la ciudad de Hartford, estado de Connecticut, Estados Unidos. Para un barranquillero como yo, acostumbrado al calor, esto es bien duro.

Hace exactamente un año estaba como usted, en bermudas debajo de un palo de mango o matarratón huyéndole al sol. Buscando afanosamente un café Internet, una peluquería o cualquier lugar con aire acondicionado. Quejándome a cada rato por el sofocante clima y el entorno. Pasando mi mano por la frente para secarme el sudor, y deseando que una gaseosa o una cerveza fría refrescaran mi garganta.

Por cosas del destino conocí por Internet a Jessica, una norteamericana con la que me casé y con la que estoy viviendo hace un año en este congelador que se llama Hartford. En Curramba yo vivía en La Floresta, y trabajaba cazando noticias como reportero gráfico y redactor de AL DÍA, siempre en el frente de batalla, buscando la información día tras día para que usted siempre estuviera al tanto de lo que pasaba, como todavía lo siguen haciendo mis compañeros. Al equipo de trabajo de este periódico sólo lo detenían los benditos arroyos.



Recuerdo que una vez en el barrio Villa Paraíso de Soledad, donde todas las calles son de arena, la camioneta en la que íbamos se enterró y no avanzaba ni un centímetro. Me bajé a ayudar al conductor y las suelas de mis zapatos casi se derriten al hacer contacto con la tierra hirviente del mediodía.

Generalmente Barranquilla es una ciudad en la que usted se puede movilizar todos los días, porque en el caso del aguacero más torrencial la urbe regresa a la normalidad en cuestión de horas.

La realidad aquí en Hartford cuando cae nieve es otra. La vida, las costumbres, las vacaciones, absolutamente todo gira alrededor del clima. Hasta los más pequeños, y lo digo por mi hija Valeria que desde hace seis meses permanece conmigo acá, viven pensando en lo que pasará el día siguiente, si amaneceremos vivos o sepultados bajo toneladas de nieve. Aunque la niña disfruta haciendo ‘angelitos’ en medio de su inocencia.

Esos copos de nieve que adornan los cuentos de Navidad y que vemos en las películas, para los que no han tenido la oportunidad de conocerlos, tienen un significado de diversión y de felicidad. Cuando cae parece mágica, son como estrellas brillantes que bajan flotando desde el cielo y que cuando tocan tu piel se desvanecen, no sin antes enfriarnos cada poro.

¿Cuántos de ustedes no han soñado con conocer alguna vez la maravillosa y encantadora nieve? Por 15 minutos es divertida y podemos hacer muñecos y ‘angelitos’, pero después se convierte en una pesadilla.

Cuando caen en cantidades alarmantes como la tormenta de nieve del pasado miércoles 12 de enero, el panorama fantasioso de los cuentos de Navidad desaparece, la cosa se pone bien fea. Hace dos días del cielo cayó ‘raspao’ con más de un metro de espesor, y nos dejó a todos literalmente sepultados. Si no me creen, miren las fotos, hablan por sí solas.

Las temperaturas en esta época del año en esta parte del mundo oscilan entre los 2 y los 25 grados bajo cero. El 29 de enero del 2010 a la media noche, cuando arribé a Hartford y mi cara hizo contacto con los 26 grados bajo cero de esta ciudad (fue el día mas frío del año pasado), sentí que me había lanzado a una piscina llena de bloques de hielo y mi piel se quemaba.

En Curramba puedes andar en pantaloneta, camisilla y unas chancletas para mitigar el calor. Si vas a salir cerca, aunque haya llovido, puedes tomar un mototaxi, un taxi, bus, bicicleta y hasta ir a pie. Aquí, con la temperatura de 10 grados bajo cero de un día como hoy (viernes, cuando escribo estas líneas), para poder salir y no congelarte afuera necesitas por lo menos diez piezas de ropa que pesan cerca de 2 kilos, y con los que tardas 10 minutos para ponértelas. Guantes, bufanda, pantalón térmico, camisa térmica, interior, medias dobles y gruesas, botas, un gorro, suéter, camisa y chaqueta.

Durante una tormenta de nieve como la del miércoles, el Gobernador del Estado ordenó el cierre de todo, es decir, colegios, empresas, en fin. Los únicos que quedan trabajando son los hospitales y demás organismos de emergencia como la Policía, Bomberos, entre otros.

Los héroes son esos hombres que con sus camiones y camionetas de todos los tamaños, y con grandes palas hidráulicas que van apilando toneladas de nieve a los lados de las calles por las noches, hacen lo posible porque se puedan transitar por las vías, sin ellos tendríamos que salir en motos de nieve, como las que vemos en las competencias de invierno en ESPN.

En Barranquilla abres la puerta del carro, enciendes el motor, prendes el aire, esperas a que salga el calor por haberlo dejado bajo el sol. Aquí a veces no podemos salir porque el carro es arropado por esas escarchas frías y blancas.

Anoche (jueves en la noche) realicé unos de los peores trabajos que jamás había hecho en mi vida, para que al día siguiente mi esposa pudiera ir a trabajar y mi hija asistiera al colegio. Se veía sencillo: quitar la tonelada de nieve que tenía mi carro, que en ese momento estaba convertido en una montaña blanca más.

Facilito, eso pensé. Me puse las 12 prendas de ropa, bajé con dos palas a cumplir la misión, afuera estaba como a 15 grados bajo cero. Luego de palear y palear, mi corazón casi se detiene. Me tiré en la nieve y empecé a sudar. ¡Qué locura, estaba sudando y no estaba en Barranquilla! Me preocupé porque me di cuenta de que me estaba dando ‘la pálida’.

Finalmente a la media noche me rendí, no pude mover el carro pero al menos retiré una parte de la tonelada de hielo que lo cubría. A la mañana siguiente seguí tirando pala y por fin lo liberé.

Actualmente trabajo en una empresa que se encarga de vender por Internet carros usados, a los cuales les tomo fotos y les hago inventario. Trabajo afuera, en la calle, soportando esas bajísimas días tras días, como millones de personas aquí. No saben cuánto extraño ese calor y ese sol que hoy los tiene sufriendo. ¡Cómo te amo y te extraño mi Barranquilla!

miércoles, 5 de mayo de 2010

Soldados de Lady Gaga, otra cara de la guerra en Afganistán

Un grupo de de diez soldados norteamericanos que actualmente se encuentran en Afganistán, han sido la sensación del día en la red internet y los medios de comunicación mundiales. Aunque para sus superiores las imágenes tal vez son un poco incomodas de ver, para el común son todo un deleite al buen humor.
Aaron Mercher, el sargento encargado de la coreografía y quien también protagonizo la caracterización del video, hablo durante una entrevista que le hicieron esta mañana en el programa ‘Eraly Show’, que se trasmite de de la ciudad de Nueva York.
“Esto era una forma para devolver una sonrisa a las casas de todos los familiares de estos soldados incluyéndolo a la mía. En mi última visita a mi esposa vi el video de Lady Gaga se me ocurrió esta idea y la realicé con ayuda de otro sargento”.

Lo más increíble es que el video hasta la mañana de hoy había alcanzado las 3 millones de vista en la página de videos ‘You tube’. Los superiores de estos soldados no se han pronunciado al respecto, pero Aaron, cree que probablemente les parezca lo más divertido que hayan visto jamás.
El nombre de la canción es ‘Telephone’ y su video original no es tan graciosos como el de estos guerreros, miren ustedes mismos y júzguen o disfruten.

lunes, 22 de marzo de 2010

un amor electromagnetico






La historia de una pareja que se conoció por Messenger y se casó.
¿Un flechazo cibernético de Cupido?
¿Ciber amor?


Por:Celso Jiménez

El amor cura todas las heridas, una frase célebre de no se quien y que en este cuento de hadas queda más que a la medida y ya sabrán porque. Más que una historia de amor, esto es algo de vida, pues definitivamente las personas nunca saben dónde van a terminar y mucho menos que les tienes el destino guardado.
En los primeros días de enero del año 2009 y luego de pasar por una tortuosa relación de la que quedo una hermosa niña llamada Valeria, un día cual quiera después de una larga jornada de trabajo, como reportero gráfico de este diario que usted está leyendo, decidí ahogar mis penas con una persona desconocida, que de forma misteriosa apareció en mis contactos del Messenger.
Ese día estaba tan solo y vacio que ni todo el dinero del mundo podía hacerme feliz, poco a poco fui desnudando mis pesares con esta mujer a la que le escribí en ingles pues ella es americana, un poco incrédula pero al mismo tiempo interesada, ella sin saberlo se estaba convirtiendo en mi paño de lagrimas, tan solo 4 meses atrás la que había sido mi esposa sin razón aparente me abandono y fue muy clara en decirme que el amor se había acabado.
A la siguiente noche a la misma hora y por el mismo medio, la misteriosa mujer estaba allí, esperándome, pensé que mi relato la había cautivado o a lo mejor ella sintió lastima o tal vez ella se sentía tan vacia y triste como yo.
El hecho es que las ciber vicitas se hicieron constantes cada noche chateábamos y desnudábamos nuestras almas, en un lugar que aparentemente no existe, el internet, un espacio intangible y electromagnético donde los reyes de la soledad del mundo entero se dan cita en búsqueda de sexo, placer, información, y cualquier cosa que se ocurra, todo esta allí, inclusive el amor.
Así mismo como en una cita a ciega ella y este servidor comenzaron a coquetearse el uno al otro, los textos y los iconos gestuales del Messenger remplazaban las miradas, los zumbidos y la música remplazaron las caricias toda era tan distinto pero al mismo tiempo autentico, casi parecía magico. Allí mismo apareció Silvestre Dangond, a quien le debo una pues con su canción “me gusta me gusta” comencé a robarle el corazón a un alma lejana a la que ni siquiera le había visto el rostro, pero que el fondo de mi alma sentía que era buena.
Del internet pasamos al teléfono, ella comenzó como todas las mujeres cuando se están enamorando, con frases como dónde estabas, porque no te conectaste, porque no me llamaste porque no me contestaste el teléfono. Poco a poco y sin darse cuenta fue sintiendo celos de un hombre al que ella estaba empezando a amar y no sabía ni cómo ni cuándo o en qué momento se le había metido en el corazón y se trago la llave para que nadie pudiera encontrarla.
Un mes después ella decidió que Colombia sería su próximo destino, aunque me lo manifestó, yo no le creí, para mi resultaba imposible creer que una mujer que estaba a más de 5000 kilómetros de distancia, llegaría a esta tierra caliente a conocerme, parecía cosa de locos.


Desde Connecticut hasta Barranquilla



El amor había despertado en los dos, el sufrimiento que me había estado matando por unos meses, desaparecía a cada palabra a cada frase bonita que esta mujer me expresaba. No pasaba una sola noche en que no habláramos largas horas por teléfono, nuestra relación era como la de cualquier novio que visita, con la diferencia que no había ninguna suegra poniendo mala cara por lo largo de la jornada, pues en los primeros meses hablábamos por teléfono hasta las 3 y 4 de la madrugada, mientras nos veíamos en la cámara, definitivamente el enamoramiento es más potente que cualquier Redbull, créanme.
Palabras románticas iban y venían viajaban a través de la fibra óptica a millones de kilómetros por hora, nuestros corazones iban tan rápido que pronto se estrellarían uno con el otro.
En los primero días de marzo ella me envió un correo, casi me pasa como condorito, increíblemente y sin consultármelo ni avisarme siquiera, compro un tiquete, que consistía en un viaje a Colombia saliendo desde New york, el 27 de marzo y llegando al día siguiente, un viaje bastante largo y que comenzó en Connecticut en donde ella vive. Un amigo la llevo manejando por dos horas hasta la capital del mundo para ella atravesar medio continente y buscar ese amor en la puerta de oro.
Hacia el medio día llego a Barranquilla, con un profundo temor en su corazón pero con la firme intención de arriesgarlo todo incluso la vida, ella se bajo de ese avión. Fue un momento sencillamente maravilloso, cuando la vi por primera vez en vivo, mi único gesto fue taparme la boca, ella había llegado realmente a mi vida.
Fuimos directo a mi casa donde le presente a mi familia la cual quedó encantada con la ternura de esta joven norteamericana que me trataba y me atendía, como si nos conociéramos de toda la vida. Santa Marta y sus hermosas playas fueron testigo silencioso del cierre de un siclo de encantamiento mutuo, allí estuvimos una semana y fue entonces cuando los cuerpos se convirtieron en uno solo. Ambos nos dimos cuenta que éramos el uno para el otro mas allá del la red, casi pudimos tocar el cielo en cada caricia.
20 días después y por cosas de trabajo ella tuvo que retornar a su país, casi que amarrada y obligada se embarco en esa aeronave, las lagrimas corrían por nuestros rostros, no nos queríamos separar, pero luego de varios intentos la convencí de que lo mejor para el futuro de nuestra relación era que ella regresara a los estado unidos a seguir trabajando.
Como todos sabemos en Colombia las cosas no están muy bien, para ella sería muy difícil conseguir un trabajo en el que pudiera ganar lo suficiente para mantener el estilo de vida al que estaba acostumbrada.
Seguimos nuestra relación en la distancia, el 13 de junio fecha de su cumpleaños ella regreso a Colombia por un fin de semana para que juntos festejáramos, para ese tiempo ya nuestro proceso legal en el ‘país del norte’ iba caminando, formularios, fotos y montón de requisitos más eran necesarios para que nuestros cuerpo se juntaran para siempre, pues ya nuestras almas eran una sola, todo era cuestión de tiempo y mucha paciencia.
Un año después de habernos conocido enero 6 de 2010 nos encontramos en Bogotá para una cita en la embajada americana, a donde me acompañó mi hija quien por cierto desde un principio se llevo muy bien con Jessica, finalmente y luego de muchas preguntas bastante personales e intimas por parte del cónsul a la que en ese entonces era mi prometida, este un hindú un poco pedante al final decidió otorgarme la visa que por fin me llevaría hasta ‘los united’ junto a mi amada.
El 28 de enero de este año en curso partí en un vuelo desde barranquilla hasta Bogotá, con mucha nostalgia y lágrimas en mis ojos por dejar atrás a mis familiares y amistades vi como a través de la ventana se alejaba lo que había sido mi terruño durante ventitantos años ‘curramba’.
El 29 al día siguiente salí desde la capital hasta la Florida, desde lo alto miraba con asombro la magnitud y la belleza de este estado norteamericano. Allí me encontré con Elvis, mi mejor amigo del barrio que vive allí hace once años, tomamos cervezas comimos y a las 8:00 de la noche me embarque en otra aeronave la que finalmente me llevaría hasta Jessica.
Desde no sé cuantos miles de pies de altura pude ver lo blanco de todas estas tierras, había nieve en cada centímetro cuadrado. A las 11:00 de la noche en el aeropuerto de Hartford, capital del estado de Connecticut, estaba la mujer de mi vida esperándome. A penas la puerta automática se abrió la abrasé fuertemente mientras al mismo tiempo un frio brutal de menos 14 grados bajo cero me dio una cachetada, un ‘quillero’ en la nieve.
El 14 de febrero pasado día de san Valentín o de los enamorados en los Estados unidos, en una ceremonia civil me case con Jessica Cruz. Fue ese día en que me di cuenta que no hay una nave que llegue más lejos que la del amor, que los sueños se cumplen y que no hay mal que por bien no venga, que viva el amor y la vida, que viva mi esposa, mi familia, y que viva Colombia.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Reportaje gráfico: día de los difuntos en Bogotá


Por:José Ricardo Torres Hernández
Comunicador Social Periodista y Reportero Grafico
Para:INFOBARRANQUILLA

domingo, 22 de noviembre de 2009

Junior va volando en los cuadrangulares: venció al Real


El equipo roji-blanco dirigido por el profesor Comesaña, en la noche de ayer derrotó dos goles a cero a la escuadra cartagenera en el estadio Metropolitano. Teofilo, fue el encargado de prender la fiesta cuando cobro un penalti que de inmediato puso a la afición barranquillera a volar.

Como siempre Giovanni Hernández, al final de la parte complementaria cobro un tiro libre que casi se convierte en gol, parece que los guardametas colombianos tienen muy bien estudiadas las trayectorias de las pelotas cobradas por el capitán del Junior, porque el arquero se tiro por inercia y se encontró con el esférico

El segundo gol también fue producto de un penalti que cobro nuevamente Teofilo Gutiérrez, y casi al final luego de una falta en el área tiburona, el real cobro y la pelota golpeo en el travesaño derecho alejando de sopetón la posibilidad de un descuento.

Este partido que fue el primero de los cuadrangulares semifinales de la copa del futbol profesional colombiano, dicho triunfo tiene a la afición barranquillera soñando y con ganas de copa.

sábado, 21 de noviembre de 2009

La mandaron desde El Edén directo al cielo


Total misterio rodea la muerte de Luisa Jessenia Pino, de 28 años, quien fue raptada de la puerta de su casa en la calle 112D con carrera 20 del barrio Los Olivos. La última vez que sus familiares la vieron fue cinco minutos antes de su desaparición en una cancha ubicada a escasos 20 metros de su vivienda, según testigos, un vehículo del cual nadie vio placas, la embarcó con rumbo desconocido a eso de las 6:30 de la tarde de ayer.
Una hora después en la calle 27 con carrera 85 del barrio El Edén, escucharon un par de detonaciones, sin embargo por temor nadie se atrevió a investigar lo que sucedía. Más tarde un grupo de muchachos que corrían como locos por el arroyo que cruza esta localidad, se tropezaron con el cadáver de una mujer con un impacto de arma de fuego en la cabeza.
Los familiares de Jessenia, se enteraron del rumor sobre una joven muerta, de inmediato corrieron a verificar si se trataba de la muchacha, Efectivamente era ella. Las autoridades policivas de Barranquilla se encuentran investigando quien raptó y posteriormente asesinó a esta muchacha.
Otras versiones hablan de que ella se marchó con un conocido de la esquina de su casa, pero esta versión no esta confirmada por las autoridades. La última palabra la tiene los investigadores del caso quienes se encuentran haciendo sus labores.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Esto es un verdadero baño feromonal



A falta de recursos econónicos, este par de indigentes utilizan el agua de una tubería rota para calmar el calor producida por el inclemente sol de Barranquilla, que en ocaciones alcanza los cuarenta grados centigrados.

Imagenes como esta se pueden captar a diario en diferentes puntos de la ciudad, sobre todo en los sectores más deprimidos. Lo unico cierto en medio de todo esto es que por ahora los colombianos de sed no se van a morir, porque aunque escasee el dinero el agua nos sobra y para prueba esta imagen captada por el periodista Celso Jiménez.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Empresas y puertos están matando el río Magdalena



Esta imagen fue captada desde un helicoptero, desde allí
se aprecian las pilas de materiales quimicos de otra
de las empresas del corredor de la vía 40 de Barranquilla


De lado a lado se extienden las pilas de carbón del puerto de Siape
las ventanas de las viviendas estan tapadas de carbón,
¿Qué ha hecho el Damab al respecto?, parece que nada.


Texto y fotos:
Celso Jiménez Fajardo
Lo que muchos mandatarios y empresarios locales llaman progreso, los habitantes del común de Barranquilla, lo llaman contaminación ambiental.
Siape es un barrio ubicado en la margen del río Magdalena al nororiente de la capital del Atlántico, allí los primeros en llegar fueron varios italianos, alemanes y filipinos los cuales ingresaron por los puertos del país y se quedaron, “eso hace más de cien años” asegura un veterano pescador de la zona de los poco que quedan y al que le apodan ‘gerente’.
Desde esos tiempos los ‘siaperos’ han visto pasar por el patio de sus casas progreso de la nación, flotando en enormes barcos mercantiles los cuales llegaron con muchas cosas nuevas y crearon la revolución que cambio nuestro país.
Por sus puertos aledaños ingresaron millones y millones y las regalías de toda esta locura comercial y de transporte marítimo y fluvial, no se ha visto reflejado en obras sociales de salud. Según ‘Gerente’ su tierra ha sido explotada desde hace más de cien años y Siape no para de sufrir.
Desde hace varios años un enemigo negro y muy volátil pero con un altísimo valor económico esta siendo embarcado en el muelle Michelle Mar, ubicado en el corazón de este populoso barrio y desde el cual embarcan miles de toneladas de carbón, el cual a su paso deja una estela de polvillo que según expertos produce graves consecuencias para la salud sobre todo a nivel respiratorio.
Según las normas internacionales de embarque de este tipo de hidrocarburos, deben contar con una pared de contención de medidas astronómicas, que supera en tamaño a la actual pared de más de 8 metros que muy poco puede hacer para evitar la propagación de este polvillo el cual se extiende a barrios mas alejados del puerto tales como San Salvador, Las Tres Ave Marías, la Floresta, San Marino y Villa carolina.
“Las ventanas de mi casa son la fiel prueba de la contaminación a la que somos sometidos injustamente” dijo Jaime Karrol, habitante del barrio La floresta con más de 20 años en el sector, quien también aseguró que en tiempos pasados se respiraba otro aire más puro.
Voces de protesta en varias ocasiones con bloqueos de la vía 40, no han sido suficientes para que el Damab, autoridad encargada del medio ambiente en Barranquilla tome las medidas necesarias para frenar esta descarada afectación del medio ambiente.
Quien lleva la peor parte en todo este negro pero lucrativo negocio es el rio Magdalena quien soporta los residuos de carbón que se desprenden el la carga de los buques y por si fuera poco es victima del vertimiento de materiales químicos altamente tóxicos que han cambiado en forma preocupante el ecosistema de esta importante pero olvidada arteria fluvial.

Vasija milenaria de los Tayronas era nido de ratas



Fue encontrada con señales de deterioro en una fábrica de colchones en Barranquilla el pasado martes 10 de noviembre
Texto y foto:
Celso Jiménez Fajardo
Luego de servir como pila de almacenamiento para los Tayronas en el año 960 después de Cristo, y de seguramente haber adornado varias fachadas y muchos otros lugares fue hallada una vasija que según arqueólogos, fue hecha hace un poco más de mil años.
La pieza que significa una gran representación de las culturas indígenas de sur América, fue hallada adornando la fachada de un almacén de colchones en el sur de Barranquilla. Según los expertos esta pieza es la tercera de la que se tiene conocimiento en Latinoamérica.
Dentro de la vasija habitan una colonia de ratas lo cual pudo haber afectado un poco la pieza y por eso se encuentra un tanto deteriorada.”En términos generales esta intacta teniendo en cuenta los embates del tiempo y el descuido al que sobrevivió” dijo uno de los arqueólogos encargados de analizarla.
La misión del gobierno colombiano ahora es convencer al actual propietario de que esa pieza Tayrona debe reposar en uno de los museos del país por su altísimo valor cultural.